El Inversionista

Hemos llegado al último cuadrante, el cuadrante I del Inversionista. Aquí se encuentran personas con habilidades y conocimientos muy amplios. Más allá del dinero que pueden ganar, los buenos inversionistas pueden gozar de mucho tiempo libre, y esa es a clave de ser libre financieramente. Tener tiempo para hacer lo que desees, de no tener preocupaciones, de saber que están seguros tu y tu familia. Tiempo de darse gusto, de disfrutar la vida y de divertirse.

Las características del inverionista es que al igual que el dueño, tiene la capacidad de tener a su dinero trabajando por él, puede poseer un muy buen equipo de contadores, abogados y banqueros que lo ayuden y estén 100% pendientes de su dinero. El inversionista tiene la habilidad de poner el ojo en el negocio, sin preocuparse si gana o pierde. Si gana, sabe que fue fruto de sus habilidades y conocimientos. Si pierde, sabe reconocerlo, pero además aprende de este error y se siente contento de tener un nuevo conocimiento.

Cualquiera puede ser inversionista, simplemente debes tener las herramientas y conocimientos necesarios y no hay otro secreto. Al igual que el dueño, tu no necesitas ser un cerebro, pero si debes ser el que tiene a los cerebros trabajando para ti.

Si comienzas a pensar como un inversionista, tus pensamientos se van a hacer tan sólidos que van a pasar al plano de la realidad. Al pasar a la realidad mediante acciones, obtendrás resultados, bueno o malos. Asimilarás esos resultados, aprenderás del error y seguirás intentándolo. Vas a llegar a un punto en el que serás un verdadero inversionista y tus resultados, serán el fruto de tu nueva capacidad mental.