viernes, 19 de abril de 2013

La pregunta que cambiará tu vida para siempre



La pregunta que cambiará tu vida para siempre

¿Sabías que, salvo algún avance científico radical, tú y todos los que conoces habrán desaparecido en 100 años? Todo ese trabajo duro y perseverancia desaparecerán así como así. Todos esos años de esfuerzo y “sólo aguanta”, se desharán en el olvido en un instante.
Ahora que (ojalá) haya llamado tu atención y puesto a pensar en la dirección correcta, aquí está la pregunta: ¿Cómo te hace sentir eso?
No intento deprimirte, pero estoy siendo completamente serio con esto. Pregúntate a ti mismo que significa eso para tu vida. ¿Te sientes incómodo? ¿Deprimido? ¿O incluso aliviado? Sin importar lo que sientas, dejarlo fluir. Aprenderás un montón sobre ti mismo y sobre a donde quieres ir.
La vida como una carrera
La primera vez que me hice la misma pregunta, estaba un poco asustado. Después de todo, si realmente acepto que voy a estar muerto en 100 (o probablemente menos) años, ¿Invalida eso todo lo que estoy tratando de hacer? ¿Qué pasa con todas mis metas y ambiciones? ¿Qué pasa con mis amigos y familiares?
Cuando esta comprensión de mi propia mortalidad me llegó, me pegó duro. Supuse que no tenía sentido lo que estaba haciendo, y que todo era inútil y absurdo. Y al mismo tiempo, teniendo en cuenta la perspectiva que tenía, tenía razón.
Tenía razón en aquel entonces porque sólo vivía por logros. Yo veía la vida como una carrera, completa con todos los aspectos de una carrera: entrenamiento intenso, luchas y estrés, con la única recompensa de la meta. Y no podía cruzar la línea de meta y ser feliz – oh, no, tenía que cruzarla primero! Si no ¿Cuál era el punto? Puedes ver lo destructivo que es esta visión del mundo.
Afortunadamente tuve la oportunidad de cambiar esa manera de pensar e introducir una mejor en mi vida. De lo que me di cuenta, por preguntarme a mí mismo esa pregunta, es que mi vida estaba seriamente desprovista de perspectiva. Se me había olvidado que soy una criatura mortal y que todo por lo que estaba luchando con el tiempo desaparecería. Las metas, las ambiciones, los sueños, todo. Aprendí que lo único que tengo garantizado es el ahora.
Al pasar por la incomodidad de confrontar mi propia muerte, gané una nueva perspectiva y una nueva forma de vida.
La vida como un ciclo
Descubrí que la vida no es una carrera. No hay ninguna competencia, a menos que por supuesto elijas creer en la competencia (entonces encontrarás un montón donde quiera que vayas). En cambio, me encontré con que la vida se parece más a un círculo, o a un ciclo que nunca acaba.
Esto es algo que muchas religiones orientales han afirmado por milenios, y es realmente muy intuitivo si lo piensas. Una vez que entiendas que no hay un punto que alcanzar en el futuro donde te sientas realizado, empezarás a apreciar tu hoy mucho más.
Empiezas a entender que en lugar de que haya una línea de meta en la vida, no hay más que otro viaje, otro ciclo que se repite. Y teniendo en cuenta el hecho de que no tomamos mucho de esta vida para el siguiente ciclo, tratar de acumular riquezas y otras “cosas” se vuelve mucho menos importante.
Más bien, un cambio magnífico comienza a desplegarse en tu vida diaria. Empiezas a notar cosas que nunca antes habías notado. Los colores y los sonidos son más intensos. Empiezas a notar el flujo de tu propia respiración. El cliché de “parar y oler las rosas” se convierte en una forma de vida. El estrés y la ansiedad desaparecen y en su muerte, la felicidad y la belleza nacen.
Haciendo el cambio de paradigma
Si intercambiar emociones negativas por emociones positivas suena bien para ti, entonces sigue leyendo. Y no te preocupes, hacer el cambio no es tan difícil. Todos podemos hacer este cambio si realmente queremos. Incluso si te enseñaron a valorar la independencia y la ambición por encima de todas las cosas desde la infancia (como a mí), todavía hay esperanza para ti. :)
Una de las formas más efectivas para lograr este cambio es pasando por el proceso que he mencionado anteriormente. Tómate un tiempo para meditar y entender realmente que todo esto es temporal. Imagina tu funeral o algo similar si ayuda. Entonces observar cómo te siente. Las partes de ti que no estén en consonancia con el momento presente serán muy evidentes. Te harán daño, gemirás y temblarás. Ouch! Las partes de ti que ESTÉN en línea con el presente se sentirán realmente eufóricas. Vamos, dales una oportunidad, ¿qué tienes que perder?
Hacer eso te dará la perspectiva que necesitas para empezar a cambiar tu punto de vista interno de inmediato. El externo caerá en consecuencia en su lugar.
Y puedes estar seguro, si la paz mental es tu meta, entonces necesitas hacer este cambio. Puede ser difícil, especialmente si eres occidental (como yo) y has tratado a la existencia como una carrera de por vida, pero puedes hacerlo.
Todo lo que toma es desaprender algunos malos hábitos y aprender algunos buenos. Al igual que el éxito en todo lo demás, todo lo que necesitas es un poco de persistencia y voluntad de cambio.

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